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Hola amigos, mientras continuamos con nuestro ayuno, ayer el duodécimo día del ayuno, probablemente tuve uno de los días más extraordinarios de mi vida. Y solo quiero alentar a la gente, tal vez estén teniendo un día difícil con el ayuno. No pueden ver nada espiritualmente. Eso es parte del ayuno.

A veces oscuro. Isaías 50 dice: «Me abre el oído, pongo mi rostro como pedernal». Y luego dice: «y los que andan en tinieblas y no tienen luz, que confíen en el nombre del Señor y no enciendan sus propios fuegos». En otras palabras, cuando has escuchado a Dios moverse hacia cierta obediencia, cierto tipo de asignación, sacrificio, te pones firme y, a veces, está oscuro. Los que andan en tinieblas, los que no tienen luz confíen en el nombre del Señor.

En otras palabras, en la oscuridad, confíen en que Dios está actuando. Él está trabajando; les dará grandes avances. Él les dará revelación, tal vez durante el ayuno, tal vez después, pero pueden esperar que Dios los ilumine mientras lo siguen y lo buscan con todos sus corazones. Ayer fue extra para mí. Por la mañana, tuve una llamada telefónica con diez líderes importantes de Israel.

Y donde la escritura dice en Romanos 9 al 11 que hemos sido injertados en la raíz Judía. Hemos sido injertados en eso. He experimentado un injerto. Mis hermanos, mis hermanos Judíos me llevaron a sus corazones y yo a los de ellos, y realmente sentí como si pudiera sentir este llamado. No solo orando por Israel, sino sintiendo literalmente que mis pies, mi corazón, estarán en esa tierra, en esa tierra. Y luego, hoy mismo recibí una llamada telefónica de un hombre Judío que no es un creyente en Yeshua, y me llamó hoy desde Israel y me dijo» “tuve una visión de ti”, y él dijo» “estoy orando por ti. Y tuve una visión; estabas frente a la ciudad antigua de Jerusalén, y un anciano con barba te dio una llave de la ciudad de David”. Y luego dijo: “vi el Salmo 1:21, es como, sentí que este ayuno, este ayuno de Yeshua, orar por los Judíos, está abriendo algo y sé que no es solo para mí”. Creo que es para todo el cuerpo de Cristo. Estos 10 hombres han dicho que muchos de ellos han sido evangelistas durante años en Israel. Han sido golpeados, encarcelados, ensangrentados, perseguidos, burlados.

Y nos pidieron que oráramos por ellos para que se produjera en sus propias almas un nuevo viento refrescante, ánimo, y un despertar tendría lugar en nuestas propias almas. Y ellos dijeron: «Somos tan pocos». 15,000 creyentes en Israel, de un total de 7 millones. «Necesitamos obreros». Así que ora conmigo ahora mismo, y mañana continuaré con esto. Dios vivo, simplemente clamamos por nuestros hermanos y hermanas en Israel, nuestros creyentes mesiánicos que son evangelistas. Hoy oramos al Espíritu Santo, Señor, que arrojes obreros a las ovejas perdidas de la Casa de Israel. Incluso en este mismo día pedimos que envíes sueños de liberación, visiones, encuentros.

Arroja a los jóvenes, jóvenes Judíos a las calles de la ciudad de Tel Aviv, en Haifa, en las ciudades de todo el mundo. Lanza obreros para que estos sean los días de los grandes despertares de los pueblos Judíos en el nombre de Jesús. ¿Podrías refrescar a nuestros hermanos? Que tengan sueños de nuevo, un nuevo sentido real de una infusión profética en las almas. Que sientan que la iglesia en todo el mundo, la Rut global, viene a traerles sus oraciones, su fuerza, su aliento. Señor, reune a los Judíos y Gentiles en esta gran y última ola. Trae a Yeshua como rey en el nombre de Jesús. Amén.